Debemos destacar aspectos como la multidisciplinariedad, la estabilidad, la paridad entre mujeres y varones, equipo pequeño y amplio, abierto siempre a lo diferente (raza, religión, nacionalidad, estado civil, edad, etc.)…La vinculación y el sentido de pertenencia, fundamental para los chicos, es de gran importancia también para todos y cada uno de los miembros del equipo, (lo que yo hago te afecta y lo que tú haces me afecta).
La estabilidad de los profesionales es importante para los chicos, pues los cambios de personal no infrecuentemente son vividos como pérdidas o abandonos que se añaden a la larga historia de otras pérdidas y abandonos ya sufridas por los niños.
La coherencia global de las actitudes y las normas establecidas en equipo, la comunicación fluida y eficaz entre todos los miembros, la práctica reflexiva y la actitud autovalorativa y autocrítica son insustituibles para un grupo que está abierto a la influencia y al cambio, siendo el Grupo Balint herramienta esencial en este encaje y equilibrio constantes del Proyecto Sirio.
Todo ello demanda una implicación responsable y un talante solidario de todos los miembros del equipo en su trabajo con los niños y adolescentes.
En este contexto se estimulan y promueven, asimismo, las actividades formativas externas de los miembros del equipo, en una diversidad de campos, todos en relación a nuestro tipo de trabajo. Un mínimo de 30 horas anuales de formación específica es obligado para todos y cada uno de los profesionales que integran nuestro equipo.